VIVIR Y DISFRUTAR

...NO MÁS ALAS ROTAS

martes, noviembre 27, 2012

FORJADORA DE LUZ

¿A quién le escribes, corazón? A quién sino a los sueños que devoran tu psique. Son tal vez, los que, siendo etéreos, no cuestionan el origen o las consecuencias. En medio de la batalla, siglos atrás, te encontraste de frente con uno de los caídos, y, sin distinguir el color del viento en sus alas, te enfrentaste a la batalla aún sin la armadura bien puesta...

¿A quién le cantas, corazón? Será tal vez a los ángeles que se quedaron dormidos en la inmensidad del tiempo, sin rostros, sin memorias y sin alas tampoco. Le cantas al recuerdo de una noche triunfal, a la victoria del bien sobre el mal... Al caos del que tanto huyes y rezongas. No me lo digas, yo los sé.

¿Qué estás buscando, corazón? Si de plata o de oro era la armadura, forjadora de hierro tendría que haber sido yo para otorgarle al general, la más poderosa de las protecciones angelicales, pero.. sin memoria, sin luz y sin voz, ¿ Cómo puedo convencerle de que era yo, aquella que en recuerdos no sé si aún vive?...

No suplico más por tus alas remendadas, pues sé que aún más largas y cuantiosas son ahora; por lo que esta vez suplico, es por mi alma, que en alguna parte de la batalla sin nombre se quedó impregnada, arrancada, olvidada...

Es sólo el reflejo lo que veo en el agua. Con dos alas a la espalda, sin ser del todo la dueña del vuelo que le acompaña. La rebeldía ha marcado el inicio y fin de ésta travesía, pero tú, a duras penas escuchas el clamor de mi voz en el desierto...

Soy la forjadora de luz, que te entregará de nuevo la segunda piel de oro y plata que mereces, pero para ello, debo emprender el viaje al momento en que en medio de la batalla, te fue arrancada la aleación de amor y virtud que para ti tenía planeada...

No moriste, pero estás desprotegido, porque ahora el enemigo puede verte sin la cubierta del incondicional fervor de mi alma. Cuídate, cariño; porque ahora ya no sé si surten efecto los conjuros que lanzo en tu nombre al viento.

De conjuros y marionetas se trata esto. Si decides emprender el vuelo, ignorando el que un día fue el viento en tus alas, adelante, comandante de la luz. Mi destino se entrelaza con el tuyo tan inexplicablemente, que de alguna manera, nuestras almas se persiguen aún entre batallas celestiales e infiernos terrenales...

¿A quién le escribes, corazón? Cuando los versos que se forjan en el taller de ésta forjadora de luz, son empacados y adornados para ti, vela en llama.

¿A quién le cantas, corazón? Cuando la música que tocaba en el cielo, era enviada directamente a tus oídos para no perder la batalla.

¿Qué buscas, corazón? Cuando, de nuevo vuelvo a encontrarte en éste que parece ser un mundo que no comprende la importancia de luz contra la obscuridad.

Aquí tienes. Ésta vez no es de oro y plata; ésta vez ésta hecha de luz, conciencia, amor y marfil, de marfil para que se mezcle con tu piel hermosamente marmórea, de luz, para que no te pierdas en la obscuridad, y de amor, para que aún cuando tú no lo sientas por mí, el que yo sienta por ti sea más que suficiente para ganar la batalla.

Triunfa. Es por ello que te he dado también mis alas. Yo, desde la forjadora, te miraré emprender el vuelo, y como títeres, los cañones no romperán de nuevo tu acero.


Así es, así ya es así será.


martes, noviembre 06, 2012

P E T I C I O N E S


Ya han pasado casi dos meses desde que el mundo se puso de cabeza y volvió a tomar su curso nuevamente, el frío del otoño hace estragos en mis labios y mientras escribo esto, vienen a mí una serie de memorias que intentan romper en llanto sobre mis mejillas.. pero no, ésta vez no.

Él dormía y no se enteró de que lo estaba mirando, principalmente observaba sus pestañas, tan largas y hermosas que deseé en un hilo de ingenuidad, que mis hijos tuvieran las mismas. Continué recorriendo su rostro sereno, sus labios se movían dulcemente, como si en sueños luchara por ganar con las palabras alguna batalla irreal, yo callo y bajo la intensidad de mi respiración para evitar invadir el mundo de sus sueños. Me intrigan sus mejillas, pues con todo y la barba que le adornan, no pierden la lozanía de una juventud que simplemente no se esfuma... siento el impulso de besarlas, pero me contengo, no quiero desarmonizar el momento.

Lo siento... se derrama una lágrima en mi mejilla. En ese momento pensé muchas cosas, recordé la sensación de vacío en el pecho cuando le escuché pronunciar las palabras que jamás creía saldrían de su boca. Ni mil cigarrillos pudieron adormecer el dolor que sentía. Seguía durmiendo, un suspiro se me escapó, él siempre está atento a mis gestos pues, sin darse cuenta, me conoce mejor que yo misma. Pasé mis dedos por sus cabellos, enredé uno de sus rizos en mi dedo índice, siempre he pensado que sus chinos no son más que el reflejo de su alma de niño...

En momentos como el que hoy rememoro, suelo levantar el vuelo surcando cielos de tiempos futuros, en mi cabeza hay imágenes de nosotros siendo uno toda la vida, mirando el horizonte bajo un atardecer que por años he dibujado en el añoro...

Se remueve entre las sábanas y yo, con sincera curiosidad, disfruto sus gestos de niño.. Como ese tan dulce de estirarse como si la cama fuera inmensamente grande y el de meter las manos bajo sus mejillas. No tiene idea de cuán feliz me hace ser espectadora de sus momentos más íntimos.

Me miro al espejo y en él parezco un tanto extraña; la chica en el reflejo sonríe y al mismo tiempo llora. Éste joven en la cama no se entera de la revolución que se lleva a cabo justo a su lado, mucho menos sabe que es el protagonista en ella.... Quién diría que hasta en otros micro universos,arma revuelta.

Pero él no lo sabe, simplemente sonríe. Me acurruco a su lado y en silencio le digo: "Gracias por éste recuerdo". De la nada abre los ojos y con inocencia me dice: "Te amo, corazón"... Mi corazón salta de alegría y comienza la clásica batalla de supervivencia a mordidas. Casi se ha disipado la nube del recuerdo astilloso.

Acostada sobre su espalda, no quiero pensar en nada más. Cierro los ojos y disfruto su aroma, pienso en cuanto lo extrañé y valoro cada segundo de felicidad que me obsequia... La vida ha sido buena conmigo.

Tú, escritor que invade mi guión, déjalo a mi lado y  no permitas que pierda su esencia de caballero genuino y candoroso. Déjanos ser "Nosotros" hoy y siempre...


Déjalo aquí.




MUSIC

MUSIC
Leave me alone

I'm just a peeping tom...

"Mientras pienso en escribirlos, enciendo un cigarro... y en el cigarro saboreo la liberción de todos los pensamientos..."
FERNANDO PESSOA en voz de LILIANA FELIPE